lunes, 25 de enero de 2010

¿Qué te creíste?

El prototipo del amor ideal siempre se caracterizó por ser asi. Un sólo fin perseguiamos los dos: conservar la felicidad hasta morir. Hubo un problema, (quizás un mal entendido) y sin quererlo, asi nos separó el destino, pero ninguno de los dos nos olvidamos que nuestro destino ya estaba marcando. Y vos, ¿A qué viniste? Si sos un 4 de copa, te creiste ancho de espada queriendo buitrearmelo. Y por supuesto que no ibas a tener éxito, si una pava como vos, con ese bombon no va. Vos te metiste en un terreno que no es tuyo, vos sos una desubicada y te olvidaste algunas cosas: Que soy la dueña de sus mejores momentos, por eso nunca sabrás como sabe hacer el amor. ¿Qué te creiste, pescada? Sos gil de cuarta, si él me pertenece como parte de mi cuerpo. Volvé a la lata y ocupate de tus cosas, que de hacerlo feliz, no hay quién se va a ocupar mejor que yo. Tanto momentos con él compartí, que no te alcanza la vida entera, por eso siempre me va a preferir a mí, y pienso estar con él hasta que yo me muera. ¡Tomate el palo, haceme el favor! Te equivocaste al elegir a tu amado, que tengas suerte buscando a tu gran amor, pero trata de que él no este enamorado.

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